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lunes, 11 de junio de 2012

Sobre el no-salvataje español. Gonzalo Perera


Quien cede ante el abuso del idioma, en la batalla de ideas, empieza el partido perdiendo  uno a cero. Por eso no se debe ceder ante expresiones como "gobierno de facto" cuando se habla de la dictadura. Porque el suavizado idiomático contribuye  y mucho a a la dilución de las ideas. Porque no es posible que una idea sea elaborada sin su arcilla que son las palabras, las imágenes o los sonidos y si se empobrece la materia prima, malo ha de ser el producto.

Vi una imagen que me conmovió, registrada en una protesta callejera en España, de inmenso poder de síntesis, carga dramática y también ironía. Protestando contra el anunciado "salvataje" financiero de España, una persona bastante mayor, portaba un cartel que decía solo una frase:


 "¡ No me salvéis!" 

Es que NO hay salvatajes de los grandes capitales hacia los pueblos, sino  actos de rapiña hacia los pueblos por parte de los grandes capitales, que la dilución idiomática y los medios del status quo insisten en llamar "salvataje", no sea cosa que nos terminemos de avivar que el que nos vino a salvar se nos llevó desde la bicicleta hasta la pasta de dientes.

La ironía  de la pancarta aludida es evidente: el salvataje, tal y como ha sido muy específicamente aclarado, consiste en una inyección de fondos destinados pura y exclusivamente al sistema financiero español, que corría severos riesgos de entrar en caída libre. Se salva a los bancos, y si bien eso puede en primera instancia pensarse que puede "salvar" al pequeño ahorrista, trabajador que ha colocado alguna suma modesta en euros en la banca (Europa es una sociedad muy bancarizada, donde tarjetas de débito o chequeras- según el país- son de uso muy extendido), en realidad solo "salvará" al baquero, a los grupos financieros que controlan las acciones de los bancos, a expensas de los euros de todos los trabajadores.

Veamos y recordemos: un "salvataje" es una inyección masiva de fondos, para generar a la vez holgura financiera y confianza ante los depositantes, evitando así las tan temidas "corridas". Más allá de su volumen sideral y de su expresión jurídica- que puede ser variada-  una primera observación es que no deja de ser un préstamo. Que como todo préstamo, luego se cobra. La pregunta es quién lo paga, a dos niveles: quién lo paga por las privaciones que ha de sufrir, y quién lo paga monetariamente mas temprano o mas tarde.

En España, el Ministro Luis de Guindos acaba de anunciar un salvataje de unos cien mil millones de euros, provistos por el "grupo euro", destinados a un recoleto acrónimo: FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancario). "Todo lindo, sino fuera por la sequía en el campo y el rayo en el rancho", se decía en mi terruño natal.

En el Uruguay sabemos de estas cosas. En el 2002, el Uruguay que no cambiaba de caballo en la mitad del arroyo, el de los acuerdos confidenciales con la gran banca  del Contador Alberto Bensión, estalló en diez mil pedazos. Vino un "préstamo puente" del gobierno de George W. Bush hasta que  nos pudieran atender los organismos multilaterales de crédito. Presidente Bush que había adquirido una notable simpatía por nuestro entonces presidente, hecho que a lo mejor guardaba alguna relación con la forzada, pretextada y traída de los pelos ruptura de relaciones diplomáticas con Cuba que nos legara Don Jorge Batlle Ibáñez. O quizás reflejaba la proverbial sensibilidad de George W. Bush, hombre afecto a la filantropía, ahura que dice, con la debida  licencia del inmortal Juceca.

Uruguay salió del 2002 mediante brutales transferencias de recursos, a saber:


1) Quienes en el momento de la crisis, por intuición o mero azar contaban con fuertes sumas de dinero no afectadas al sistema bancario uruguayo, multiplicaron varias veces su patrimonio ya que pudieron comprar campos, casas, apartamentos, locales comerciales, a precios de miseria, los que, cuatro o cinco años después volvieron a  tomar valores "normales" o incluso elevados. Así, cualquiera que pregunte un poco se encontrará con adquisiciones por cien mil dólares en el 2002 que en el 2007 se re-vendieron por un millón de dólares ( a valores constantes). En 5 años, sacar nueve de ganancia por cada dólar que se invirtió: dígame Ud. si hay acaso mayor negocio. Esto es una viejísima leccion de Economía, pero que suele ignorarse contra toda señal de la Historia: las crisis son endémicas, necesarias e inherentes al capitalismo. Son los choques de placas tectónicas que desplazan a algunos y encumbran a otros, pero además son una oportunidad de hacer negocios de oro, generando a grandes capitales la oportunidad de multiplicarse de forma superior a lo soñable.


2) Si bien algunos bancos lisa y llanamente quebraron, el buque insignia de nuestra  banca, el BROU, actuó como "tapón" del sistema financiero y de las cuentas del Estado. Muchos de los ahorristas del BROU, por diversos mecanismos, tomando en cuenta los tiempos que debieron esperar, las "compras de ahorros" que algunos no tuvieron más remedio que aceptar ( capitales importantes que compraban depósitos "acorralados" por un valor sensiblemente inferior), perdieron una suma muy significativa que no desvaneció en el aire sino que se fue a los capitales que compraron oro por baratijas, o a los pagos  que el Uruguay debió hacer al FMI y tenedores privados de deuda soberana. Que fueron suavizados por algunos muy inteligentes recambios de deuda realizados después del 2005, pero no quita que al hacer el diagrama de flujo de fondos, la dirección de la corriente es harto evidente: de abajo a arriba y de adentro hacia afuera. Como en toda crisis, obviamente.


3) Más allá de todo activo tangible, los uruguayos vivimos suicidios, fallecimientos por causa de stress agudo, desmembramientos familiares por jóvenes que se iban al exilio, estudiantes universitarios a punto de egresar comiendo una vez al día  (nadie me lo contó , lo viví en alumnos muy queridos), escolares comiendo pasto el fin de semana , trabajadores desesperados, parejas quebradas por el peso de la angustia cotidiana, multiplicación de la marginación y la violencia. ¿Cuántos trillones de dólares  de indemnización debería reclamar la clase trabajadora uruguaya, el laburante de a pie, el ama de casa, el estudiante, nuestros gurises, por ese tiempo de infierno en vida, si las cuentas hubieran de cerrarse con un mínimo sentido de justicia?


España vive hoy lo que antes nosotros. "Austeridad" (eufemismo por "sufrimiento") para la clase trabajadora, "salvataje" (eufemismo por "tremendo negocio para algunos grandes capitales internos y externos") para el sistema financiero.


La indignación- genuina, legítima y más que justificada- cunde y toma hasta ropajes de arte o humorada punzante.

El quiebre -ya cubierta por el Estado español- de Bankia, incentivó el ingenio flamenco a arrancarse por bulerías


"Tú me has bajaíto el sueldo / me lo subiste toíto / para poder defenderme / hasta mi casa yo he vendío... / Me busqué dos curriyos / pa’ la hipoteca...Bankia, Bankia, Bankia / pa ti seis pulmones pa mi ni unas branquia..."

Quizás vivió en Uruguay. O quizás a fuerza de vivir con los ojos abiertos y empecinarse a que dos mas dos le de cuatro, por su lado, el señor mayor que sostenía su pancarta daba refugio a la más lógica economía elemental y a la mismísima dignidad, con su ironía: "¡No me salvéis!"


El "salvataje español", una vez más, succionará hasta los dientes de oro de abajo hacia arriba y de adentro hacia fuera. siempre y cuando no sea estéril y el sistema financiero español termine hechos trizas igual, en cuyo caso la succión incluirá vidas enteras y todos los intangibles que ninguna moneda puede expresar y que ni siquiera se cuantifican por los billones de lágrimas que arrancan, sistemáticamente, a los ojos más curtidos o más inocentes.






1 comentario:

  1. Un relato breve, didáctico , y veraz.

    Los Latinoamericanos venimos diciendo y publicando a los españoles , sobretodo a los trabajadores , lo que podría suceder en España , con gobiernos como los que ahora tenemos . SI, lo vivimos y como dice este extraordinario artículo , nos costó sangre sudor y lágrimas y destrucción de las familias por la migración ( hoy tan criticada ). El pueblo cambió el rumbo y hoy Uruguay , con dos exelentes Presidentes , en 7 años , cambió para bien en 160 grados. Están avisados , lean entérense y la decisión está en el pueblo Español .

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